La exportación de bombas de racimo de Estados Unidos a Arabia Saudí va en contra de las directrices internacionales, ha advertido este jueves la Coalición contra las Municiones en Racimo (CMC, por sus siglas en inglés).
Lo ha manifestado la directora de la CMC, Sarah Blakemore, en reacción al reciente contrato firmado entre los dos países, destinado a la entrega de 1 300 bombas de racimo de fabricación estadounidense a Arabia Saudí.
A juicio de Blakemore, debido al “impacto humanitario negativo de las mencionadas armas en la población civil”, del cual son conscientes las autoridades de ambos países, ha sido prohibido su empleo por parte de “más de la mitad de las naciones del mundo”.
“De esta manera, cualquier transferencia (de bombas de racimo) va en contra del rechazo internacional de estas armas”, ha reiterado la máxima autoridad de esta organización que vela por proteger a la población civil de las consecuencias de las armas.
Es de mencionar que Washington y el régimen de Israel no rubricaron en 2008 la Convención sobre Municiones en Racimo, firmada por 94 estados en Oslo (Noruega). El pacto, entre otras condiciones, veta el empleo, fabricación, almacenamiento y transferencia de municiones en racimo.
El pasado martes, el departamento de Defensa de EE.UU. indicó que ‘Textron Defense Systems’ había ganado un contrato por valor de 641 millones de dólares destinado a suministrar 1 300 bombas de racimo a Riad.
0 comentarios:
Publicar un comentario